🎓 Camino por recorrer hasta que lleguen los fondos UE

La cifra está fijada —750.00 millones de euros— y también está pactada la distribución entre los distintos estados. Sin embargo, la llegada de los fondos a las arcas de los países tiene que pasar todavía por un proceso complejo que puede ser más lento de lo que inicialmente parecía. 

Sin ir más lejos, esta misma semana se ha conocido que diversos países, entre los que se encuentra España, han tomado la decisión de no solicitar, de momento, la parte de créditos del fondo. Este anuncio no solo se explica en la intención de no incrementar la creciente deuda pública, sino también en el propósito de “ganar tiempo”. Y es que, como explica el profesor de Empresa y Economía Albert Guivernau, “para poder obtener los préstamos hay que explicar en qué los gastarás, y España no ha presentado todavía proyectos concretos”. 

Se trata, en suma, de tener un poco más de margen para definir el Plan de Proyectos y “cerrar las negociaciones bilaterales con la Comisión”. En este punto, “no olvidemos que está entrando en juego el concepto ‘cumplimento del Estado de Derecho’ como requisito para acceder al fondo y que algunos de los países afectados tienen capacidad para retrasar las negociaciones”, una cuestión que también nos afecta directamente, ya que Europa “ha puesto el ojo en la reforma del poder judicial que el Gobierno quiere tirar adelante”, aprecia Guivernau. 

A lo expuesto hay que añadir que el proceso requiere la aprobación del fondo por parte del Parlamento Europeo y los parlamentos de los países miembros y que el Consejo Europeo puede plantear todavía objeciones al plan de proyectos que presente cada país. En este escenario, “no nos alejamos mucho de la realidad si pensamos que los fondos llegarán a finales de 2021 o principios de 2022”, pronostica Guivernau. 

Además, añade este economista, en el caso concreto de España, hay que tener en cuenta que el plan que presente será “de los más analizados y cuestionados por el resto de economías”. 

Severas recomendaciones 

En la línea de lo anteriormente explicado, Guivernau espera importantes apuntes por parte de la Comisión al Plan Presupuestario presentado por el Gobierno: “Estoy prácticamente seguro de que recibirá severas recomendaciones en relación con el mercado laboral, para pedir que no se derogue la reforma laboral y se flexibilice el mercado. También se pedirán medidas alternativas a los ERTE, para no mantener vivas algunas empresas de forma artificial”. En relación con el empleo, este profesor universitario pronostica que se pondrá “énfasis en las medidas para combatir el paro y en el hecho de que, en 2019, siendo una de las economías que más crecía, España también era de los países de la UE con más paro”. 

Además, añade este experto, es probable que se “ponga en cuestión la renta mínima” y se exija “una reforma del sistema de pensiones”. En este punto, recuerda que el plan de la Comisión no trata de una “reconstrucción” económica encaminada a recuperar la situación previa a la crisis, sino que busca una “transformación” de las economías.