🎓 Cinco hombres generosos, en el origen de la UE

En la amistad de cinco hombres generosos, en el improbable encuentro entre tres hombres de frontera, un inspirador y un ateo confeso, ahí puede encontrarse el germen de la actual Unión Europea. Este componente humano de la construcción del proyecto europeo es el que explora la periodista y asesora del Grupo Socialista en el Parlamento Europeo, Victoria Martín de la Torre, en el libro Europa, un salto a lo desconocido, publicado por Ediciones Encuentro. La autora ha estado en nuestra universidad para hablar de esta obra y reflexionar sobre la actualidad en clave europea, en un acto organizado dentro de las actividades del Departamento de Derecho y Ciencias Políticas.

El quinteto estaba formado por Schuman, De Gasperi, Adenauer, Spaak y Monnet. Los tres primeros eran los hombres de frontera, personas originarias de territorios que habían pasado de un Estado a otro en la primera mitad del siglo XX. Monnet fue el “inspirador” y Spaak aportó la perspectiva atea, en principio poco afín a la visión democristiana del resto de miembros del grupo.

Según ha explicado Martín de la Torre, la “generosidad” de todos ellos fue clave para que surgiera una sintonía personal que puso en marcha el círculo virtuoso. “Supieron trabajar por el bien común e ir mucho más allá del interés nacional o de partido”.

Además, añadieron un ingrediente de liderazgo para sobreponerse a un contexto que tampoco era el más propicio. “Hay que pensar que la Declaración Schuman llega sólo cinco años después del final de la Segunda Guerra Mundial. Fueron valientes y revolucionarios, porque, hasta entonces, las relaciones internacionales se basaban en equilibrios de poder”. En su caso, en lugar de moverse por una lógica de poder, lo hicieron por otra de “perdón y reconciliación”.

Sustrato común

Todo ello fue posible porque compartían un sustrato común. “Tenían una formación cultural impresionante”, ha observado la escritora. Según ha explicado Martín de la Torre, en la idea de las comunidades europeas puede detectarse la inspiración de filósofos personalistas como Maritain o Guardini y los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, plasmados en encíclicas como Rerum Novarum o Quadragesimo Anno. “Compartían un humanismo que ponía a la persona en el centro. La confluencia entre la democracia cristiana y la socialdemocracia explica el modelo social europeo que tenemos hoy”.

Sin embargo, aprecia Martín de la Torre que, tal vez, sea necesario llevar a cabo una actualización para acomodar la UE a la realidad del momento. “No tenemos por qué mantener el mismo modelo, conservando los principios, podemos cambiarlo”, ha afirmado.

Recuperar la visión de conjunto

Han acompañado a la autora el ex eurodiputado, Francesc Gambús, y el catedrático de Economía Aplicada, director de nuestro Centro de Estudios Geográficos y Políticos y rector honorario de nuestra universidad, Juan Corona. Gambús ha manifestado que, antes que actualizar el modelo de la UE, “habría que retomarlo”. Considera Gambús que la UE ha ido perdiendo esa noción de conjunto que la había caracterizado y comienzan a primar cada vez más los intereses particulares de los estados que la componen. Para reconducir esta tendencia, apuesta por introducir medidas concretas: “hay que democratizar más la elección del presidente de la Comisión”.

Corona, que ha confesado su europeísmo, ha compartido su visión de que el fortalecimiento de la UE es casi un imperativo desde el punto de vista geopolítico. “Si Europa fuera un país, sería la primera potencia económica del mundo. En cambio, como micro-países europeos no tenemos mucho que hacer para competir”. Detecta Corona que, en los últimos tiempos, se han cometido errores que debilitan la estructura institucional y económica de la UE: los órganos de gobierno no son operativos, no se han cumplido los criterios de Maastricht para la entrada en el euro y, en muchos casos, “se ha comenzado la casa por el tejado”. Respecto a esto último, ha subrayado que lo lógico “habría sido realizar la unión fiscal antes que la monetaria”.

Corona también ha emitido un juicio sobre el Brexit, que ve como un “lose-lose” en el que pierden todos. “Es malo para Reino Unido y malo para la UE, aunque peor para el Reino Unido”.