🎓 La impronta de la Misión Esperanza y Caridad

A comienzos de año, una expedición de once estudiantes de las tres universidades del CEU y de personas vinculadas a sus respectivas pastorales universitarias emprendieron viaje rumbo a Palermo para desarrollar una acción de voluntariado en la Misión Esperanza y Caridad. La iniciativa de este viaje transformador había partido del Servicio de Pastoral de nuestra universidad, y más concretamente de los profesores Jorge Martínez Lucena y Carmen Cortés. 

La Misión Esperanza y Caridad no es un lugar cualquiera. Esta obra de la Iglesia es un enclave en el que se manifiesta la cruda realidad de los desamparados y, al mismo tiempo, la posibilidad de una vida más auténtica a través de la entrega al prójimo. La misión fue creada por Biagio Conte, con el apoyo del sacerdote Pino Vitrano, y actualmente es un lugar de acogida de personas en situación de exclusión, entre las que se incluyen centenares de africanos que pisan suelo siciliano tras una penosa travesía por el mar Mediterráneo. 

Por este motivo, respecto de la estancia en Misión Esperanza y Caridad, más que de una acción de voluntariado, cabe hablar de una experiencia de aprendizaje. Este es el enfoque del reportaje-documental Vivir en Esperanza, producido por el estudiante de Periodismo Javier Oliver. A través de imágenes y testimonios recopilados durante aquellos días en Palermo, el reportaje refleja no solo la actividad de la Misión, sino también la impronta de cambio que deja en las personas que entran en contacto con ella, entre ellos, el propio Oliver. 

El proyecto de estancia en la Misión Esperanza y Caridad obtuvo el premio a la Solidaridad que anualmente concede el International Council of Universities in the Spirit of Saint Thomas Aquinas (ICUSTA). Se trata de una organización internacional que agrupa instituciones educativas que reconocen la influencia del magisterio de santo Tomás de Aquino. Pertenecen a ella 29 centros de diferentes continentes. 

Una de las sedes de la Misión es Via Decollati, que fue el lugar donde comió el papa durante su visita a Palermo con motivo de la beatificación del padre Giussepe Puglisi. Cerca de 800 inmigrantes africanos viven actualmente en Via Decollati.