🎓 Un perro para restaurar la “confianza rota” del paciente

La profesora del grado en Psicología de nuestra Universitat, Mar Álvarez, participó la semana pasada en el programa Tarda Oberta de TV3, en una tertulia para explicar las bondades de la terapia psicológica asistida con animales

Fecha: martes, 12 de diciembre de 2017 a las 18:15h

Un perro para restaurar la “confianza rota” del paciente

La profesora del grado en Psicología de nuestra Universitat, Mar Álvarez, participó la semana pasada en el programa Tarda Oberta de TV3, en una tertulia para explicar las bondades de la terapia psicológica asistida con animales.

La profesora Álvarez conoce de cerca el empleo de animales como elemento auxiliar a la terapia gracias a su participación en el proyecto TEVI del Centro de Salud Mental Infanto-Juvenil de Cornellà (Hospital San Joan de Déu). En este proyecto, destinado al tratamiento de menores que han sido testigos de violencia doméstica, la introducción de perros sirve para crear un ambiente de confianza con pacientes que “tienen la confianza muy rota”, como explica la profesora en su intervención televisiva.

Junto a Álvarez, en el plató estaba la miembro del Centre de Teràpia Assistida amb Canes, Eva Domènech, las equinoterapeutas Inés Fernández y Katrin Kopperschmidt, y, por supuesto, Bamba, Buba y Tevi, tres de los perros de TEVI. Algunos de ellos han participado en sesiones celebradas en la Universitat.  

La Unidad Terapéutica de Asistencia Psicológica

Los beneficios de la terapia asistida con perros son un hecho constatado y una vía que cada vez se explora más en el ámbito psicológico. La propia Unidad Terapéutica de Asistencia Psicológica que nuestra universidad tiene en el área de consultas externas del Hospital Sagrat Cor introdujo recientemente un servicio de psicoterapia asistida por perros. En este caso, el servicio está pensado para la intervención individual con adolescentes y se realiza en colaboración con Consultadogs.

Entre los beneficios de contar con la presencia de un coterapeuta canino se incluyen los siguientes: no juzgan ni prejuzgan, muestran una aceptación incondicional, aumentan la motivación del paciente y mejoran su atención y concentración durante las sesiones y disminuyen los sentimientos de rechazo y estigmatización.

Un perro para restaurar la “confianza rota” del paciente